Pensareis que me he esfumado, pero
noooooo, nada más lejos de la realidad. Aquí, estoy otra vez, dándoos caña!!!
Os cuento...
Aparte de volver a ejercer como Chef, en
el Restaurante "Villa de Noja", me he embarcado en una aventura que
de momento, no os voy a adelantar mucho, pero lo que si os diré, es que está
resultando ser súper apasionante y motivadora para mí, por esta razón he dejado un
poco el Blog y las redes sociales, un pelín de lado, aunque os dejo con un
trabajito que hice ya en el mes de Junio y que aun no había mostrado.
Se trata de un aparador de madera noble,
encontrado tirado en Noja en el mes de Mayo. Dicha pieza, me ilusionó mucho
cuando me la trajeron, porque me había juntado con 3 vitrinas, pero la verdad
que aparadores no había encontrado ninguno y me hace mucha ilusión, terminar de
decorar mi nuevo salón en este año.
El estado, era lamentable...
Toda la estructura era de madera de Haya y
digo era, porque la verdad que quedaba lo justo para reconocerla. Totalmente
desecha, aunque las imágenes no revelen la realidad...
2 de las patas, se encontraron tiradas a
su lado, junto con otra pieza de madera que no pertenecía al aparador, pero que
estaros seguros que algún uso le daremos ;)
La carcoma, había hecho en él un buen
trabajo, todo se deshacía entre las manos, pero ya me conocéis...
Tras limpiar en profundidad todo el roble
(Puertas, detalles, etc.), se trató con antixilófagos para eliminar y dejarlo
vacunado para muchos años.
Lija, sustitución de piezas, fabricación de otras para recomponer su estructura, pintura,mas pintura, barniz para la encimera, más barniz, más lanilla y bueno...